
Descripción del hotel
El Tantaka – Albergue Los Meleses se encuentra en Radiquero, a 34 km de Huesca, y ofrece una barbacoa y parque infantil. El establecimiento alberga un restaurante. Hay aparcamiento privado gratuito y WiFi gratuita en todo el recinto.El alojamiento incluye un bar y zonas de jardín y de relajación. La cocina prepara un menú a la carta con varias opciones saludables.Hay recepción 24 horas.Este albergue cuenta con servicio de préstamo de bicicletas y la zona es perfecta para practicar senderismo. Aínsa se encuentra a 29 km del Tantaka – Albergue los Meleses y Boltaña, a 30 km.
Dirección: Calle los meleses 9 22145 Radiquero Spain
Número de habitaciones: 7
Precio aproximado de la habitación: 16 EUR
La casi desconocida ciudad de Huesca, situada en el norte de España (Aragón), data del siglo IV antes de Cristo. 2000 años después de haber adquirido la denominación de municipio romano, esta ciudad posee aproximadamente 50.000 habitantes.
Huesca es un destino bastante famoso para los turistas debido a su encanto rural, su cercanía con un gran parque nacional conocido como el Parque Nacional de Ordesa -declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO- y una serie de encantadores monumentos, yacimientos y ruinas de su pasado morisco y romano.
Demografía y ordenación
La demografía de Huesca es bastante dificil de comprender si no tenemos en cuenta las diferentes ordenaciones que se usan. Huesca se divide tanto por municipios como por comarcas, además de los llamados partidos judiciales.
– Municipios: algunos de los más importantes son Monzón, Basbastro, Jaca y la propia Huesca capital.
– Comarcas (algunas de ellas engloban también territorio zaragozano): Alto Gállego, Bajo Cinca, Cinica Medio, Hoya de Huesca, Jacetania, Monegros, Ribagorza, Sobrarbe, Hoya de Huesca… etc.
– Partidos judiciales:
- Partido Judicial de Barbastro (formado por 41 municipios)
- Partido Judicial de Boltaña (compuesto por 31 municipios)
- Partido Judicial de Fraga (formado de 16 municipios)
- Partido Judicial de Huesca (formado por 61 municipios)
- Partido Judicial de Jaca (formado por 26 municipios)
- Partido Judicial de Monzón (compuesto de 27 municipios)
Importancia histórica
Los destinos turísticos principales de Huesca ponen de manifiesto lo relevante de esta ciudad a nivel histórico. Tras ser bautizada como «Bolskan» por los íberos, conquistada por los romanos y tomada por los árabes y posteriormente por los cristianos, Huesca tiene un patrimonio monumental y arquitectónico que no tiene que envidiar a otros destinos punteros en demanda de viajeros.
Clima y actividades
Su clima – continental con algunos matices mediterráneos – la convierten en un destino ideal para todas las estaciones del año, alternando inviernos frescos y nevados con estaciones más secas y soleadas, ideales para excursiones al aire libre. Zonas como Candanchú o Formigal son ideales para ensayar esquí en invierno, así como deportes de aventura en primavera y Otoño.
Si visitamos esta ciudad podremos disfrutar de murallas como el cinturón defensivo del siglo X, iglesias y catedrales como la de San Pedro el Viejo o la Catedral de Santa María (más conocida como catedral de Huesca), palacios como el de los Climent, Oña o el de los Claver, y otros lugares de interés como museos, monumentos y zonas verdes y de ocio en el casco antiguo.
Gastronomía
La gastronomía de Huesca bien merecería un capítulo aparte en esta guía. Basada esencialmente en la carne de cordero, es conocida generalmente cómo cocina del Alto Aragón.
El ternasco (cordero) y el cabrito son populares platos de la cocina típica por norma general hechos a la espedo. Asimismo los pescados fluviales tienen gran protagonismo dentro de los platos de la región, cómo puede ser el abadejo ajoarriero, el bacalao o la trucha pirenaica.
Los amantes del vino también han de estar de enhorabuena, pues Aragón además cuenta con una oferta de vinos muy poderosa, dentro de los que destaca el Somontano, los vinos de la Tierra Ribera del Gallego-Cinco Villas y Tierra Valle del Cinca, entre otros.
Lugares de interés en Huesca
Montaña en el Pirineo de Huesca
Los amantes de la montaña tienen en Huesca un escenario inolvidable para practicar deportes de aventura en casi todas la estaciones del año. Alta montaña, aguas bravas, valles increíbles y rutas senderistas convierten la vertiente sur de la cordillera pirenaica un destino ideal.
El pirineo oscense se compone de las comarcas del Alto Gállego, La Jacetania, Ribagorza y Sobrarbe, entre otras. En ellas vamos a poder disfrutar de lugares como el Parque Nacional de Ordesa, el Monte Perdido o el Parque Natural de los Valles Occidentales.
Si nos apetece hacer senderismo, encontraremos rutas destinadas a personas de todos los niveles, pudiendo hacer desde paseos de 2,2 kilómetros a dificultad baja en el Salto en Salient hasta rutas sólo aptas para los más expertos, como la cresta de las Espadas en Posets (17,5 Km).
Si somos practicantes del esquí, en esta zona nos encontramos con más de 345 kilómetros de nieve repartidas por estaciones como las de Astún, Candanchú, Cerler Formigal y Panticosa.
La oferta de actividades de aventura y deportes extremos como el barranquismo, espeleología, rafting o kayak es tan variada que podremos disfrutar de las mismas en la práctica totalidad de comarcas y municipios con montaña del pirineo oscense.
Catedral de Huesca
La catedral de Huesca, ubicada en el centro de la ciudad, da nombre a la también transitada Plaza de la Catedral. Declarada Monumento Histórico Artístico en el año 1931, esta obra arquitectónica de estilo barroco despierta gran interés en medio de los visitantes de la ciudad, ya que posee un enclave magnífico para alternar su visita con otras actividades de interés.
Tras la reconquista, la Mezquita Mayor de Huesca se recicló para convertirse en la catedral que ahora conocemos, siendo en el sigo XVII cuando se dieron los últimos retoques a la construcción con la intención de quitar toda huella de la Edad Media que albergase.
Su principal atractivo es el conocido como Retablo Mayor, obra de escultura de estilo renacentista realizada en alabastro por su autor Damián Forment en torno a 1520 y 1524.
La fachada principal es, curiosamente, de estilo gótico, y procede de principios del siglo XVI. Está dividida por un alero al estilo aragonés, y dispone de una parte baja realizada por Guillem Inglés en el año 1327.
Monasterio San Pedro el Viejo
El Monasterio de San Pedro el Viejo está situado -al igual que la Catedral- en el casco antiguo de Huesca capital. Esta llega a ser una de las iglesias más antiguas de España, siendo asimismo una de las que mejor conservan el pasado godo. Entregada a los cristianos para ensayar el culto en la época musulmana, la construcción se divide en dos partes más importantes: claustro e iglesia.
En su interior vamos a poder disfrutar de diferentes estilos, desde el renacentista hasta el gótico, pasando por el estilo barroco del Retablo de Los Santos Justos y Pastor, entre otros.
El retablo mayor en este caso fue realizado por Juan de Alí a principios del siglo diecisiete. En las capillas circundantes encontraremos obras de distintos períodos; desde pinturas murales del siglo trece hasta la curiosa sillería de madera del siglo diecisiete, pasando por un retablo de estilo gótico como es el de la anunciación (Siglos XV-XVI).
Dentro del claustro encontraremos varias capillas que el paso del tiempo ha conservado de diferente manera. Destaca la Capilla de Santa Ana y San José, del siglo XIII, la Capilla de San Benito y el Panteón Real o Capilla de San Bartolomé, en el que podremos observar los restos de los monarcas aragoneses Alfonso I el Batallador y Ramiro II el Monje.
Restos encontrados en el lugar hace algunos años nos destapan que este monasterio alojó algún tipo de necrópolis o templo romano.
Recomendamos la visita guiada, así como no dejar de preguntar por las numerosas piezas de orfebrería y escultura que se localizan en las antiguas zonas privadas de los monjes.